Hace poco más de un año, un nuevo electrodoméstico apareció en el mercado y, rápidamente, llamó la atención de miles de personas: el horno freidora de aire.
Este, tal como su nombre lo indica, es similar a una freidora de aire, ya que ambos equipos contienen un ventilador interno que hace circular aire caliente a gran velocidad, lo que produce que los alimentos preparados queden con capas crujientes, dando la sensación de que se hubiesen frito en aceite.
Si bien es cierto que existen ciertas diferencias entre estos dos aparatos -como la capacidad, versatilidad y estética-, los dos son igual de saludables y funcionales, y, por tanto, te aportarán múltiples beneficios en tu día a día.
Si quieres enterarte de las ventajas de tener un horno freidora en tu hogar, continúa leyendo este post, pero ¡cuidado! porque corres el riesgo de obsesionarte con este producto. Nosotros tenemos que admitirlo: ya no podríamos vivir sin él.
7 beneficios de tener un horno freidora en tu casa
- Ahorras tiempo: actualmente, muchos buscamos la manera de aprovechar mejor las horas de nuestro día y, sin duda, la mejor forma de hacerlo es facilitando los quehaceres domésticos. Con el horno freidora, podrás acortar notablemente los tiempos de cocción de tus recetas, lo que hará que la tarea de cocinar sea mucho más simple. Imagínate, ¡podrás hacer papitas fritas en tan solo 15 minutos!
- Ahorras dinero: en abril de este año, el litro de aceite superó los $4.000 en algunas zonas del país, lo que cayó como un "balde de agua fría" para muchos chilenos. Con el horno freidora ya no tendrás que sufrir por este gasto desmedido, ya que te permite reducir el uso de aceite en tus recetas hasta en un 99% -no necesitarás más que una cucharada para lograr la crocancia deseada-, lo que significará un gran ahorro en tu cuenta, sobre todo si eres de los que aman las papitas fritas y las demás frituras.
- Más sano: además, este equipo te permite preservar de mejor manera los nutrientes de tus alimentos y, tal como mencionamos anteriormente, te ayuda a reducir el consumo de aceite y, por ende, las grasas saturadas (¡tu corazón te lo agradecerá!).
- Versatilidad en tus recetas: si eres de los que suele repetirse las recetas cada cierto tiempo y aburrir a tu familia con ello, con el horno freidora no tendrás de qué preocuparte. Gracias a los múltiples accesorios que incluye, podrás ir variando tus preparaciones a diario y sin complicarte demasiado la vida. Puedes hacer brochetas de pollo o carne, pavo al horno, pizza, camarones, pescados y mucho más. Las posibilidades son infinitas y los límites solo los pones tú.
- Aprovechas mejor tus momentos: ay, qué molesto es cuando tienes que estar vigilando constantemente la olla o el sartén para evitar que tus recetas se quemen, ¿no? Bueno, con el horno ya no tendrás esa preocupación, ya que solo debes apretar un botón y dejar que el equipo haga todo el trabajo por ti. Imagínate: mientras la comida se esté cocinando, tu podrás hacer deporte, pasar más tiempo con tus personas favoritas o ver esa serie que tanto te gusta. ¡Qué agradable!
- Adiós, malos olores: si eres de los que odian cuando hay demasiado olor a fritura en tu casa, el horno freidora será tu nuevo mejor amigo, ya que no emite olores molestos y, por consiguiente, estos no se impregnan en tu ropa ni en tu pelo. Si antes te parecía tedioso hacer algunas preparaciones por el olor que despedían, por fin ya no tendrás que preocuparte de eso, ¡qué alivio!
- No ensucias demasiado: muchos detestamos tener que cocinar durante 30 minutos y lavar por 1 hora, ¿no? Bueno, con este aparato dile adiós al montón de platos y utensilios sucios, porque todo lo podrás hacer en un mismo lugar. Además, el horno cuenta con una bandeja de residuos que recoge los restos de comida y excesos de grasa, lo que que facilitará todavía más su limpieza.
Además de todo lo que ya mencionamos, es importante recalcar que el horno freidora tiene un consumo de 1500W, lo que implica que, si lo utilizas 1 hora todos los días, gastarás un adicional de $6.400 mensual, aproximadamente. Si consideras que solo 1 litro de aceite cuesta $4.000, te darás cuenta de que el ahorro es bastante significativo.
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