Inicio de la pandemia, conflicto entre Rusia y Ucrania, y estallidos sociales en diversos países de América Latina. Así es como, durante los últimos 30 meses, el mundo ha estado viviendo un escenario lamentable, plagado de hechos que infunden temor y ansiedad en la población.
Sin embargo, muchas de estas noticias solo llegaban a nosotros a través de los medios y, si bien nos entristecían y preocupaban, no nos afectaban directamente -o al menos eso pensábamos-; pero, actualmente, la situación ha comenzado a mutar, ya que la inflación que aqueja a Chile y al mundo empezó a afectar notablemente a nuestros bolsillos.
Sin ir más lejos, hace unos días el valor del aceite sufrió un nuevo aumento, con lo que su precio superó los $4.000 por litro en algunos sectores del país. Así, durante los últimos 2 años, este producto experimentó un alza de casi el 100%, lo que altera y angustia a miles de familias chilenas que lo utilizan a diario.
Ante esto, el ministro de Agricultura, Esteban Valenzuela, explicó que este fenómeno se debe a que Rusia es uno de los principales productores de las materias primas para hacer distintos tipos de aceite, por lo que, desde el Gobierno, se implementará un programa llamado "Siembra por Chile", que busca "paliar de manera sustancial esta alza de insumos y así poder contribuir a nuestra seguridad alimentaria y a la contención de los precios agrícolas", tal como explicó la autoridad.
Asimismo, Valenzuela aseguró que se espera corregir el alza del aceite dentro de los próximos 6 meses y que, mientras tanto, el llamado es a "buscar alternativas, innovaciones".
Pero no solo es el aceite el que ha causado polémica, sino que la bencina también está en el ojo del huracán. De hecho, este jueves 7 de abril, la Empresa Nacional del Petróleo (ENAP) anunció que las gasolinas de 93 y 97 octanos, el diésel y el gas licuado de uso vehicular, subirán $6.7 por litro.
Con este nuevo incremento, los combustibles -a excepción del diésel- superan los $1.000 por litro en casi todas las zonas del país.
En este escenario, es prudente preguntarnos qué podemos hacer, como ciudadanos comunes y corrientes, para paliar el efecto de esta crisis económica en nuestros bolsillos. Y la respuesta más lógica pareciera ser la misma que la del ministro Valenzuela: buscar soluciones que nos permitan "ahorrar" en estos insumos.
Por eso, y en la medida de lo posible, el llamado es a optar por alternativas de transporte más sustentables, como caminar, usar la bicicleta, buses o el Metro; y, en el caso del aceite, lo más sensato sería encontrar una forma de cocinar en donde pudiésemos prescindir de este producto: con una freidora de aire.
La freidora de aire es un aparato similar a un horno eléctrico pequeño, que en su interior contiene un ventilador que hace circular aire caliente a gran velocidad, lo que produce que los alimentos preparados queden con capas crujientes, dando la sensación de que se hubiesen cocinado en aceite.
Así, este electrodoméstico permite reducir hasta en un 97% la cantidad de aceite utilizada en las comidas, sin perder los sabores y texturas que tanto te gustan.
Y, aunque sea difícil de creer, en este equipo se puede cocinar -casi- de todo: pollo, pescado, camarones, pizza, verduras, snacks, postres e, incluso, frutas deshidratadas.
Sin lugar a dudas, este aparato se posicionó como el elemento ideal para subsistir ante esta alza continúa de aceite y para no gastar tanto en luz, porque -a diferencia de lo que comúnmente se piensa- una freidora de aire ocupa menos electricidad que un horno convencional o un microondas, ya que acorta los tiempos de cocción y, por ende, necesita estar menos tiempo conectada.
Además, y aunque en este punto pareciera no ser lo primordial, el cocinar en una freidora de aire nos permitirá comer más saludable y tener más tiempo libre, ya que optimiza totalmente el proceso de preparación de nuestras comidas, las que quedarán igual de ricas y crujientes que con métodos tradicionales.
Si bien muchos podrían pensar que invertir en una freidora de aire es muy costoso -aunque, en cualquier caso, no debiese superar los $180.000-, a largo plazo será más rentable que gastar diariamente en aceite, ya que, tal como advirtió el jefe de la cartera, es probable que esta situación no se normalice antes de 6 meses.
Por eso, te invitamos a utilizar nuestra "Calculadora de Aceite", para que estimes cuánto gastas mensualmente en este producto y veas qué es lo que realmente te conviene.
Entonces, y como en todas las situaciones, tenemos dos opciones: o nos quejamos o hacemos algo al respecto. De ti depende.
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