Sin duda, durante la pandemia del COVID-19, el  yoga tomó mucho más protagonismo en Chile y el mundo, debido a los múltiples beneficios que entrega tanto a nivel físico como espiritual, ya que es una doctrina que combina el cuerpo, la respiración y la mente.

De hecho, los que lo hemos practicado alguna vez en nuestras vidas lo sabemos bien: después de cada sesión, terminamos relajados, agradecidos y, tal vez, un poco adoloridos. 

Si bien hoy en día existen distintos tipos de yoga -como el  ashtanga, vinyasa o bikram-, en esta oportunidad nos centraremos en el kundalini, que se enfoca en la energía y la fuerza, con tal de hacerte sentir más vital, despierto y consciente de ti mismo. 

Este estilo de yoga es  ideal para que lo realicen los más pequeños del hogar, ya que permite combinar distintas posturas y técnicas con juegos y cuentos, lo que ayuda a los niños a entretenerse y, al mismo tiempo, relajarse. 

Por eso, en  Mouvair conversamos con  Gabriela Cortés Miranda, una  influencer chilena y profesora de yoga integral especializada en kundalini infantil, quien nos entregó información sobre el yoga para niños y por qué podría ser útil durante el  receso invernal que decretó recientemente el Gobierno. 

• El yoga era popular antes de la pandemia, pero durante los meses de cuarentena mucha más gente se sumó a la práctica, ¿a qué crees que se debió esto?

Esto ocurrió porque el yoga es una disciplina que ocupa poco espacio en términos prácticos, solo necesitas un  mat y nada más, entonces puedes hacerlo en casa, no como los otros tipos de deporte en los que tienes que salir al aire libre. Además, el yoga te calma y desestresa, entonces, aparte de estar trabajando fuerza y cardio, también puedes relajarte, y eso te da un  plus que no todas las disciplinas tienen.

• ¿Y por qué los niños han sido excluidos de esta práctica?

En general, los niños casi siempre son excluidos, porque la sociedad en la que estamos es muy adultocentrista, entonces a los niños se les dice que jueguen solos, que hagan sus propias cosas, y no se ve que realmente son personas íntegras y que también tienen estados emocionales difíciles y desagradables. Aparte, a las personas no se les ocurre la manera de hacerle yoga a los niños, porque se cree que el yoga es una disciplina tranquila y, por eso, se piensa que los niños se van a aburrir y no van a estar haciéndolo durante 45 minutos. Ahora, cuando tú conoces qué es el yoga para niños y entiendes que es como un cuento para los más chicos o un juego para los más grandes, ahí todo te calza.

• ¿Y cómo se desarrolla el yoga kids?

Primero, llegamos a la clase con alguna cajita o algo para llamar la atención de los niños y niñas, porque la sorpresa en el cerebro es súper importante y los hace activar la concentración inmediatamente, y por eso siempre ocupamos la técnica de llevar algo como un juguetito de madera o metal, pero nunca de plástico, porque el plástico no tiene temperatura y no es tan conectado con los sentidos. Después, les hacemos un mantra -puede ser el que tú quieras- y prendemos una velita, y los pequeños saben que esa velita se conecta con su interior, es como la luz de su corazón; y, luego, se les hace un cuento, pero con yoga, entonces yo les cuento historias -que pueden incluir moralejas y enseñanzas- y voy haciendo posturas y respiraciones, y ellos me van imitando. Después, se les hace una relajación y una meditación activa acompañada de un mantra y, finalmente, apagas la vela y terminas la clase. Así lo hacemos con los niños menores de 6 años y, en el caso de los mayores, es lo mismo, pero en vez de un cuento es un juego, entonces así se les pueden enseñar posturas más difíciles.

• ¿Cuáles son los beneficios del yoga para niños?

Les ayuda a tener una mejor interacción con sus pares y con los adultos, porque en una clase de yoga se trata con mucho amor y respeto, y eso se extrapola a otras áreas de la vida. Además, ayuda a los pequeños a reconocer los niveles de energía que tienen que ir ocupando a lo largo del día, porque dentro de una misma clase tenemos movimiento, relajación y meditación, entonces los niños aprenden que hay momentos para moverse, otros para concentrarse y otros para estar en paz y tranquilos. Asimismo, el yoga ayuda a activar la concentración y atención, porque hay partes específicas que se dedican a eso, y también ayuda a la flexibilidad, porque -contrario a lo que se cree- no todos los niños son flexibles. Y, finalmente, contribuye a que los niños tengan un buen desarrollo a nivel escolar, porque disminuye los niveles de estrés y, por ende, el pequeño estará más tranquilo y tendrá mejores resultados.

• ¿Qué consejo les darías a las mamás y papás para que sus hijos se interesen en el yoga durante este receso de invierno?

Primero, tienen que mostrarles el yoga como un juego, tiene que ser algo entretenido, porque si se los muestran como algo serio no les va a gustar, sobre todo porque hay mucho prejuicio contra el yoga por parte de los niños que tienen acceso a internet, ya que en las publicidades lo muestran como algo muy tranquilo. Por eso, a los niños hay que enseñarles el yoga a través de juegos y cuentos, siempre de manera lúdica. Por ejemplo, si en la casa tenemos el libro de la Caperucita Roja, al lobo le vamos a poner una postura, a la caperucita otra y a la abuela también. Entonces, cuando salga el lobo vamos a hacer su postura y así sucesivamente, y de esta forma los niños van conectando con el yoga y les encanta, enganchan rápido, porque es algo entretenido y con mucho movimiento.

• Y, por último, ¿cómo debe ser el lugar en donde se practique esto?

Si quiero que mi hijo conecte con el yoga, tenemos que hacerlo en un lugar que no tenga muchas distracciones, como la pieza de los papás, el living o el pasillo. También, se pueden hacer rituales que le indiquen al niño qué es lo que va a pasar, por ejemplo, que los papás prendan un incienso y así el pequeño sepa que es la señal que dará inicio al juego del yoga.

En Mouvair siempre velamos por tu bienestar y tranquilidad, y por eso te invitamos a probar el yoga, independiente de la edad que tengas. Y, si no te gusta, ¡trata con otra disciplina! Lo importante es intentar mantenernos activos y tranquilos, sobre todo en períodos de crisis.