Por si te lo perdiste, pronto llega a Mouvair electrodoméstico favorito: nuestro hervidor eléctrico inteligente con cuello de cisne, Mouvair Swan.

Como hablamos en el artículo de la semana pasada, el Mouvair Swan no es cualquier hervidor, sino que está pensado para aquellos amantes de corazón de las infusiones, que desean combinar la funcionalidad con un diseño elegante y estético. El cuello de cisne te dará una precisión nunca antes vista a la hora de verter el agua, brindándote un chorro controlado con el que podrás decir ¡adiós las salpicaduras!

Por otro lado, su control de temperatura es ideal para diversas preparaciones. Amantes del café, del té o de la hierba mate; sabemos lo importante que es para ustedes la temperatura del agua. Y si esta es la primera vez que escuchas sobre eso, ¡no importa, aquí te lo contamos todo!

¿Sabías que la temperatura del agua sí importa?

Ya sea que prepares té, café o mate, la temperatura del agua sí es importante. En el caso del café, cuando el agua está demasiado caliente, por encima de los 96°C, puede resultar en una extracción excesiva, dándote un café demasiado amargo. Por otro lado, si el agua está muy fría, por debajo de los 90°C, tu café quedará plano y sin vida, privado de ese sabor que tanto amas.

La temperatura del agua también influye en la acidez y la dulzura del café. Un agua más caliente tiende a resaltar los sabores ácidos, mientras que las temperaturas más bajas pueden resultar en un café menos ácido y más dulce. Dependiendo de tus preferencias, puedes ajustar la temperatura para hacer la taza perfecta de café para ti, idealmente, manteniéndote en un rango entre 90°C y 96°C.

Por otro lado, ¿qué pasa con las infusiones y tés? En este caso, un agua demasiado caliente destruirá los taninos, sustancia que da a tu té el color y sabor. Además, debes tener en cuenta que hay algunas variedades de té más “delicadas” que otras, en las cuales tienes que cuidar de no quemar las hierbas. Por el contrario, el agua fría no permitirá que los mismos taninos se desarrollen y, por ende, no se disuelvan como deben; en este caso encontrarás que tu taza de té es insípida, con más sabor a agua que a té.

Para que te hagas una idea, ¡aquí va una tabla!

Algo similar ocurre con la hierba mate, pues esta determina las propiedades de la infusión, así como su sabor. Si usas agua hirviendo, la yerba mate tendrá un sabor muy intenso y perderá muchas de sus valiosas propiedades, como la cafeína: Así que, si tomas esta infusión por su efecto estimulante, ¡no hiervas el agua!

Por otra parte, una temperatura del agua demasiado baja hace que la infusión sea demasiado débil. No estimula todo lo que debería y no libera del todo su sabor y aroma.

Mejor… ¡ni muy fría ni muy caliente! Si quieres tener una buena infusión matera, que te aporte todos los minerales valiosos y asegure el efecto óptimo de estimulación, lo mejor será utilizar agua a una temperatura de unos 70°C y 80°C.

¿Qué te parecen estos tips? ¿Conocías esta información sobre la temperatura del agua?